¿Volvemos al cole?

De forma sorprendente me he puesto al día con el papeleo, algo que odio pero que no queda más remedio que hacer, ya que me lo he quitado de encima aprovecharé para escribir un ratito en el blog y agradecer a ANBER GLOBE S.A. la inspiración para este post.

Trabajar para varias empresas del sector de protección contra incendios me permite visitar a una gran variedad de clientes finales, uno de los sectores en los que me he movido últimamente es el de la educación.

Y en la educación ya sabemos que hay que separar centros públicos y privados.

La situación en la mayoría de los colegios públicos que he visitado y en los que he realizado operaciones de revisión, mantenimiento y sus respectivos informes de los sistemas de protección contra incendios, al menos es calificable de… preocupante.

En líneas generales los sistemas de bombeo de agua para BIES no es que estén averiados, simplemente llevan años abandonados, con fisuras debido a congelaciones desde muchos años antes de la crisis, en alguno de ellos incluso las raíces de los arboles han penetrado en las tuberías y han cegado los colectores de las bombas y el aljibe . De los centros que he visitado solo uno tiene la sala de bombas en buen estado, y es un instituto nuevo, ya veremos cómo está dentro de unos años.

Las juntas intumescentes de las puertas corta-fuegos, no es que estén en mal estado, es que son inexistentes.

Los sistemas de detección manual… donde existe sistema de detección manual, están fuera de servicio en su mayoría, los pulsadores suelen ser un amasijo de cables colgando de un tubo de canalización eléctrica y por lo tanto las centrales de control se encuentran desconectadas.

Se suelen salvar los extintores, aunque en la mayoría de los centros se encuentran situados por encima de la altura reglamentaria. Que estén instalados por encima de los 170 cm. normalizados puedo disculparlo y comprenderlo.

Cuando hablo con los directores de los coles para explicarles la situación todos me dicen lo mismo, prepáreme un informe y lo remitiré a la consejería de educación en el caso de los institutos y a los ayuntamientos en el caso de los colegios. Y fin. En los dos años que llevo como free lance, ninguno de mis clientes ha realizado un correctivo en un colegio público basado en algunos de mis informes. Aunque dado el estado de las instalaciones da la sensación de que no se ha realizado un correctivo jamás.

Otro tema aparte son los centros privados. Muchos tienen detección automática en las aulas, los pulsadores también son víctimas de los chavales, pero son reparados de forma inmediata, ya que, aunque alguno de sus propietarios sí que esta realmente concienciado con la seguridad de los niños, la mayoría de ellos simplemente mantiene a la última su sistema para que no le cierren el colegio.

Ya sabemos que el estado pone las normas y luego las incumple, pero está claro que obliga a los colegios privados a tener unas instalaciones PCI que luego abandona en los centros de su propiedad.

Yo no tengo hijos, pero desde aquí, recomendaría a los padres que llevéis a los niños a coles públicos que exijáis que os garanticen el correcto funcionamiento y mantenimiento de los sistemas de protección contra incendios, podéis utilizar las asociaciones de padres para ello. Una cosa es recortar, algo en lo que podemos estar o no de acuerdo y otra muy distinta es escatimar en la seguridad de los niños.

Yo seguiré haciendo informes en los centros educativos y seguiré volviendo desolado cada vez que termino el trabajo en uno de ellos.